Es difícil saber de cual de nuestros padres viene cierta característica de nuestra personalidad. Lo que sí sé, es que mi padre me heredó el gusto por mi país, México.
Cual gitanos modernos, mi familia y yo fuimos y seremos nómadas en busca de la casa perfecta en la ciudad con el mejor atardecer. Y esto sí puedo estar seguro que viene de mi padre. Y así, pasamos por el norte, centro y sur del país, de estado en estado. Ya fuera de viaje o para quedarnos unos cuantos meses, la frase que siempre se repetía era: "Estamos conociendo".
En cada lugar de nuestra travesía no nos perdimos de pueblo alguno o camino desconocido que llevara a un escenario o paisaje único y especial. Por eso sé que Morelos tiene más ciudades que Cuernavaca y Cuatla, y no sólo ciudades, hermosos pueblos con vibra mágica y diferente como Tepoztlán o Chiconcuac. El mismo Estado de México traspasando las fronteras de nuestros vecinos de Cd. Satélite para llegar a Tequisquiapan o desviarse rumbo a Toluca para introducirse en el mundo de olores y formas del mercado de Santiago Tianguistengo.
La característica que más disfruto de mi padre es la habilidad para convertirse camaleónicamente en lugareño. A los pocos minutos de llegar al lugar ya se sabe los puntos claves de la ciudad, el nombre de la persona que todos conocen, el último desarrollo o terreno en venta (esto mas que nada por su profesión) y el lugar donde comer que tenga la mejor vista y los mejores precios. La memoria fotográfica, el gran sentido de la orientación y la aversión a preguntar direcciones, hacen que los locales lo vean como parte del paisaje.
Por todo esto es que pienso que mi padre erró de profesión, aunque su gran habilidad y conocimiento para las ventas han mantenido a la familia por más de 30 años, yo creo que cualquier pueblo, ciudad o estado lo quisiera como promotor turístico o secretario de turismo. Pensar que aun siendo los mexicanos una de las razas más patrióticas, ya quisiéramos querer, admirar y disfrutar este país como lo hace mi padre. Sólo me queda la alegría y tranquilidad de saber que ese amor por México lo llevo en la sangre.
Feliz día del padre. Te quiere tu hijo.
Nadiee...
La característica que más disfruto de mi padre es la habilidad para convertirse camaleónicamente en lugareño. A los pocos minutos de llegar al lugar ya se sabe los puntos claves de la ciudad, el nombre de la persona que todos conocen, el último desarrollo o terreno en venta (esto mas que nada por su profesión) y el lugar donde comer que tenga la mejor vista y los mejores precios. La memoria fotográfica, el gran sentido de la orientación y la aversión a preguntar direcciones, hacen que los locales lo vean como parte del paisaje.
Por todo esto es que pienso que mi padre erró de profesión, aunque su gran habilidad y conocimiento para las ventas han mantenido a la familia por más de 30 años, yo creo que cualquier pueblo, ciudad o estado lo quisiera como promotor turístico o secretario de turismo. Pensar que aun siendo los mexicanos una de las razas más patrióticas, ya quisiéramos querer, admirar y disfrutar este país como lo hace mi padre. Sólo me queda la alegría y tranquilidad de saber que ese amor por México lo llevo en la sangre.
Feliz día del padre. Te quiere tu hijo.
Nadiee...
2 comments:
Me da mucha emocion el saber que pude inspirar, y veo que ha tenido sentido, un poco de la aventura que ha sido mi vida, a las personas que ni en los sueños mas lejanos NADIE puede siquiera imaginar. Soy el hombre mas orgulloso del mundo...
Hace 4 años (y 4 meses para ser exactos) te conocí y decidí elegirte como amigo. Dicen que “los amigos se cuentan con los dedos de la mano y a veces sobran dedos”. Seguramente a ti te faltan dedos pero estoy feliz porque uno de esos lugares lo está ocupando tu papá…es un gran noticia y un gran ejemplo para mí de que “todos podemos re-inventarnos”…mil gracias amigo!
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